CAPITULO 1:
Esta historia sucedió en Lisboa donde se encontraba la
familia de la que voy a hablar.
La familia eran cuatro y un pequeño perro con ojos
deslumbrantes y ladridos alegres.
Toni, el padre, era
un esbelto hombre lleno de sabiduría y saber estar. Tenia un pelo brillante,
corto y liso, una mirada alegre, dientes blancos y boca chiquitita. Su nariz
era achatada y cuello descubierto. A él le gustaba trabajar y nunca se cansaba.
Isabel, la señora de
la casa, era delgada y alta, de unos 35 años, su forma de andar es que siempre
va recta y con movimientos exagerados de caderas. Sus ojos eran azules como el
cielo y deslumbraban a simple vista. La boca era de tamaño normal, pero siempre
pintada. Su nariz puntiaguda, sus dientes descuidados y pequeños, su pelo rubio
y largo. Era una señora que trabajaba en casas pero su afición era cantar.
Luis era el nombre
del niño pequeño, su edad era 5 y muy maduro para la que tenia. Era un niño
revoltoso y comilón y su cuerpo era de forma jorobada. La cara la tenia
asustada y suave. En su rostro llevaba unos voluminosos ojos azules. Los niños
de la clase lo llamaban "cobarde". Su forma de hablar era que
pronunciaba la "r" como "g", lo cual le daba aspecto de
francés, aunque sus padres no lo fueran. Su pequeña nariz era redondita. Sus
cejas negras hacian conjunto con su pelo y color de piel. Tenía una cicatriz en
el pié izquierdo por una mordedura de un perro abandonado y perverso. A pesar
de todo esto, Luis iba al colegio y le
encantaba aprender.
La niña Amanda, con
10 años, era una niña responsable y tranquila. Era extrovertida y por su rostro
se notaba que era buena estudiante. Sus dientes brillantes se veían por su
boca, la cual siempre sonreía. Era alta y delgada, parecida a la madre. También
era muy guapa.
Esta familia llamada
los Estelson querian encontrar una nueva casa para poder vivir sin ningun
problema, porque en la que vivían habia muchas goteras y grietas por culpa de
un incendio que fue provocado por una
chispa de la chimenea mientras dormian, ya que ellos no apagaban la chimenea
por la noche.
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